Reinfección por coronavirus: pocos casos que aún no confirman la pérdida de inmunidad

Dentro de los 24 millones de contagios en el planeta, existen tres casos de reinfección por coronavirus. Se trata de los tres primeros casos detectados de personas que, tras ser infectadas por el SARS-CoV-2, habrían vuelto a dar positivo pocos meses después pero a una cepa diferente del virus.

Mavens

Contenidos para Medios

Los casos de reinfección descritos pueden ser “la excepción que confirme la regla” en una pandemia de estas dimensiones y, por ahora, no demuestran que se haya perdido la inmunidad, según la doctora Carmen Cámara, secretaria de la Sociedad Española de Inmunología (SEI).

El de Hong Kong, es el de un hombre de 33 años asintomático, el de Bélgica se trata de una mujer con síntomas leves que no ha requerido hospitalización, mientras que el de Holanda es un anciano con el sistema inmune deteriorado y del que no se ha informado acerca de sus síntomas.

Se trata de los tres primeros casos detectados de personas que, tras ser infectadas por el SARS-CoV-2, habrían vuelto a dar positivo pocos meses después pero a una cepa diferente del virus, por lo que se considera reinfección y no recaída. Por este motivo, los especialistas indican la importancia de distinguir entre reinfección por coronavirus y nueva enfermedad. 

Según la inmunóloga, es posible que una persona se vuelva a contagiar con el coronavirus, que dé positivo pero no desarrolle la enfermedad, aunque pueda contagiar; si no la desarrolla “puede ser porque el sistema inmune ha funcionado, se sigue acordando del virus aunque sea una cepa diferente”, puntualiza.

De momento, estas reinfecciones no demuestran que la inmensa mayoría haya perdido la inmunidad casi ocho meses después de haberse notificado los primeros casos de COVID-19 en China.

Así, se podría poner de manifiesto que la inmunidad de memoria no es esterilizante, es decir, que no elimina al virus, al menos en todos los individuos, y que posiblemente las vacunas necesitan dosis de recuerdo a medio plazo.

No obstante, los casos anteriormente mencionados no son de momento frecuentes, pero sí que ahondan en la gran heterogeneidad de la respuesta inmunitaria en los individuos.

En opinión de Carmen Cámara, estos tres casos no van a cambiar el curso de las vacunas en desarrollo porque tampoco serán vacunas que nos proporcionan inmunidad permanente sino a corto plazo, como las de la gripe. ese sentido. De cualquier forma, la inmunidad que genera una enfermedad siempre es más potente que la que proporciona cualquier vacuna.